Por este motivo, nuestra especialista insiste en que las personas que estamos habitualmente con ellos debemos estar muy atentos a su comportamiento para detectar de forma precoz los problemas visuales en la infancia.
Su corrección temprana evitará problemas en la escuela relacionados con el aprendizaje, la atención y la concentración.
¿Cómo pueden detectar los padres un problema de visión en sus hijos?
Podemos detectar un problema observando al niño, si se pega mucho al texto, si adopta posiciones extrañas con la cabeza, si no tiene una buena elección de los colores al pintar, la falta de atención, pegarse mucho a la pantalla del ordenador o adquirir posturas viciadas a la hora de escribir.
¿Cuáles son los principales problemas de visión en los niños?
Pueden ser refractivos o de graduación, entre los que se incluyen la hipermetropía, el astigmatismo y la miopía, y que representan el 20% de los problemas en la edad escolar. Cuando estos defectos visuales no están bien corregidos, derivan en otros problemas como el ojo vago o la ambliopía y el estrabismo.
¿Cómo podemos prevenir los problemas visuales en los niños?
La mejor prevención es la información. Las personas que están continuamente con ellos deben observar los signos. Si a un niño le duele la cabeza de forma frecuente y reconoce el dolor entre los ojos, en las sienes o en la nuca, o guiña los ojos o, después de estar jugando a un juego común con otros niños, pierde la atención o el interés pronto estamos ante un problema visual.
Si sospechas que tu hijo o hija tiene un problema de visión, reserva una cita en oftalmología pediátrica en Policlínico Risso.